miércoles, 12 de marzo de 2014

PRIMAVERA: MADERA, ÁCIDO, GRITAR


MADERA, ÁCIDO, GRITAR

En estos días de inicio primaveral, despertó un impulso de elaborar sahumerios, conos de incienso para quemar...no es raro que ocurriera mientras reposaba afectada por un resfriado de cambio estacional. En reposo, mi cuerpo conectaba con oleadas de calor que me traían ira y pensamientos que la justificaban, y la consiguiente actuación de reprimenda o protesta hacia pareja e hijos con los que convivo.
Tras un par de días de irritación de laringe, afloró el lagrimeo y moqueo, y ese día mi apetito se inclinó exageradamente por el zumo de naranja y pomelo en la mañana y los pepinillos en vinagre mientras preparaba una sopa de cebolla y acelgas...

Con este relato, comparto como cada estación promueve diferentes movimientos energéticos en nuestros cuerpos. Según la medicina china, están en proceso de desintoxicación y adaptación a la nueva estación, los siguientes meridianos:
Hígado, vesícula, triple calentador, rama lateral de intestino delgado, vía tendo muscular, intestino grueso, conexión estómago vesícula. 

A cada cual se le manifestarán los síntomas de forma peculiar, según sean sus tendencias individuales, lo normal es manifestar algunas molestias durante unos días, pero no más de una semana.
Las expresiones desequilibradas de esta auto regulación de nuestra máquina biológica tienen que ver con ira, enfado, rabia, excitación, impulsividad, impaciencia, pedantería, exceso o defecto de autocontrol, hipersensibilidad, inestabilidad emocional, frustración, rigidez cognitiva, confusión, adicción al trabajo, incapacidad para relajarse...y a nivel físico: alérgias, eccemas, soriasis, asma, hepatitis, colesterol, diarrea, estreñimiento, flatulencias, hongos, cándidas, mala digestión, cansancio, dolor de cabeza y cuero cabelludo, problemas de vista, sequedad ocular, deshidratación de la piel y palidez facial. 

La primavera activa el elemento madera, y de ahí mi afinidad por los sahumerios, elaborados con serrín..., el ácido contrarresta la mucosidad, ambos neutralizan el exceso de humedad en nuestros cuerpos...y se activa el fuego interior que nos lleva a la acción y consumación...pero también a ponernos en nuestro lugar, la dignidad personal y colectiva. La primavera es el momento de la lucha y la protesta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario