El verano es la estación ideal para ponernos en contacto con los 4 elementos en la naturaleza. Tierra, aire, agua y fuego, están en nuestra constitución en continuo re-equilibrio. Conectar con ellos en la naturaleza afecta a nuestros diferentes niveles, pero siempre a favor de la evolución, aun cuando puedan sentirse algunos efectos indeseables temporales.

Por ejemplo, una insolación es un exceso de fuego en nuestro cuerpo. Pero lo natural del verano es reavivar nuestro fuego interior y esto Ocurre sólo con la subida de la temperatura. Si estamos expuestos en lugares ventosos, también afectará a nuestra mente, con resultados diferentes si es aire cálido o frío.Los baños o cercanía del agua, moviliza nuestras emociones, y un paseo por el campo, la montaña, nos transmite la serenidad y sostÉn de la tierra. En todos los lugares están todos los elementos, y podemos observar cual es la danza que establecen y cómo nos afectan.
Desde esta concepción del cuerpo en relación con el medio y la energía, elaborolos productos para disfrutar del verano, colaborando con los movimientos energéticos de nuestro cuerpo.
El sol es nuestro aliado, no nuestro enemigo. No voy a exponer los múltiples beneficios de su exposición, pues es de todos conocido. Voy a remarcar que activa nuestro sol interior, la energía yan, masculina, el calor, y cada persona lo nota y reacciona según su nivel basal así como su programa de la psique que dirije la expresión del yan en su vida. Una intolerancia fuerte al sol, puede ser un reflejo tanto de un exceso como de un defecto de yan en el individuo.Todo es beneficioso en su justa medida. Pero sin duda la exposición al astro rey, moviliza hacia un nuevo equilibrio nuestro fuego interior. El exceso de calor, las urticarias, quemaduras, que manifiesta nuestra piel tras las primeras exposiciones, si nos descuidamos, son re-equilibrios físicos del yan reprimido o intolerado en nuestro cuerpo.

A base de aceites vegetales, ecológicos, de jojoba, sésamo, coco, zanahoria y manteca de karité, variando la proporción según tipo de piel.
Filtro físico: óxido de zinc
Aromas de aceites esenciales repelentes de insectos o florales, o perfumes naturales: Mango, Monoi de Tahiti o coco. Dependiendo de si estamos en campo o playa.
Biotecnología regenerativa de microorganismos efetivos.
También elaboro protector solar para el cabello, adecuado en cabellos secos.
También elaboro protector solar para el cabello, adecuado en cabellos secos.
Puedes beneficiarte del AFTERSUN, hidratante, calmante natural, extrae el exceso de calor y regenera la piel. Con aloe vera, aceite de caléndula, esenciales de lavandín y litsea cubeba (alimonado), y biotecnología regenerativa de microorganismos efetivos.
La mejor manera de protegernos de las picaduras de insectos es equilibrando nuestros bloqueos energéticos en el cuerpo. La reacción a una picadura de insectos es calor e inflamación, un exceso de yan. El insecto es atraido por la zona del cuerpo donde hay un bloqueo, acúmulo de energía. La picadura libera esa energía en forma de calor. Podemos darle las gracias al insecto por su trabajo acupuntor. Y también podemos a través de los aceites esenciales y las flores de Bach, desbloquear los nudos para no atraer a los insectos.
ATENDIENDO A ESTA LÓGICA, EL PROTECTOR DE INSECTOS QUE ELABORO ES TAMBIÉN UN EQUILIBRADOR DEL AURA. Una selección de ac.esenciales "REPELENTES", con UNA PROPORCIÓN en equilibrio yin-yan, entre los que se encuentran citronela, menta, lemongras, albahaca, árbol de té, cedro...y una selección de flores de Bach, desbloqueadora de nudos, entre las que se encuentran Estrella de Belén y Manzano... y biotecnología regenerativa de microorganismos efetivos.
Así mismo elaboro un REMEDIO de URGENCIA para calmar picaduras, quemaduras y urticarias inevitables. Con caléndula, aloe, vinagre, y R. Rescate (flores de Bach) y biotecnología regenerativa de microorganismos efetivos.
Puedes hacerme tus pedidos durante junio y con un margen de tres días a una semana para la entrega.
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